Cruzar un paso de peatones y estar en la playa, ¡guau! la arena tan fina y el mar que te cubre los tobillos hasta el infinito y más allá, no creo que se ahogue un niño ni adrede vamos, sin olas, transparentita y con unos pececillos muy simpaticones y escurridizos :)
Entre las cosas interesantes que fuimos a ver destaco el monumento al Sagrado Corazón de Jesús, las erosiones de Bolnuevo y una heladería-cafetería en el faro, desde el que pudimos disfrutar de las mejores vistas de la Bahía, ¡espectacular! La gente simpática y agradable. Nos faltaron muchas cosas por ver como el acueducto, los restos arqueológicos, la torre de los caballos... Pero no se puede todo jejeje, porque después fuimos a parar a Los Alcázares, un lugar único en el hotel Senator Mar Menor Golf & Spa Resort de 4* muy chulo también, sin faltar detalle, lo mejor las piscinas muy divertidas.
Poco pudimos hacer por aquí, más que el Paseo Carrión y su escultura a José Sazatornil.
Y cenar... Las Cazuelas de Julia II, mi marido pasó a felicitar a la cocinera y todo, y los camareros muy majos.
¡Qué pena volver! Hasta aquí todo. Hasta pronto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario